Enfermedades de las Venas
Várices e insuficiencia venosa
Los trastornos de las venas afectan hasta la mitad de la población, y en los miembros inferiores ocurren casi todas las manifestaciones: desde arañitas vasculares por las que muchas pacientes evitan mostrar sus piernas, hasta la insuficiencia venosa crónica, en la que las pacientes sufren estigmas que involucran inflamación, manchado de piel y úlceras que nunca sanan.
Cirugía láser de las venas
En nuestro consultorio ofrecemos la cirugía de primera línea que se ofrece en Norteamérica y Europa para el tratamiento de la enfermedad venosa crónica, con muy bajo riesgo, mínimo dolor postoperatorio, sin incisiones quirúrgicas (sin cicatrices), y con una recuperación mucho más rápida que con la cirugía convencional (Safenectomía).
Escleroterapia con espuma y líquido
La inyección de un alcohol especial (polidocanol) es el método más utilizado a nivel mundial para el tratamiento de várices pequeñas y medianas, en particular las que causan problemas de estética y autoestima en las mujeres. La espuma se prepara inmediatamente antes de realizar la inyección, con la que se logra la destrucción de hasta un 95% de las venas enfermas en y bajo la piel. Los resultados son muy apreciados por las pacientes en periodos variables de algunas semanas. El procedimiento es de muy bajo riesgo, el dolor es mínimo por algunos momentos, y no se requiere reposo posteriormente.
Ultrasonido Doppler Venoso
El diagnóstico correcto de la insuficiencia venosa requiere de la realización de un estudio de ultrasonido Doppler junto con la valoración clínica. En Punto Médico Valle Chavarría hacemos este estudio siguiendo las guías mundiales de la UIP (anatómico y hemodinámico), teniendo la ventaja de que el mismo especialista que valora clínicamente al paciente es el mismo que realiza el ultrasonido, con lo cual el tratamiento es más personalizado y preciso.
Adicionalmente, entregamos con el reporte una ilustración digital en la que se explica gráficamente qué venas están enfermas y en qué consiste el trastorno, con superposición en una imagen real del miembro del paciente. A esto se le llama «mapeo venoso».
Ulceras venosas
Cuando la insuficiencia venosa lleva muchos años sin tratamiento adecuado, la sangre que se acumula cada día en el tobillo provoca un estado inflamatorio que hace que el cuerpo convierta la piel y el tejido graso de esa zona en un campo de batalla, sin agresor externo, de modo que el único daño lo sufren esos tejidos. Es cuando se ven cambios en la piel como enrojecimiento (confundido con erisipela), oscurecimiento, y, por último, formación de una herida crónica que no puede sanar mientras persista la insuficiencia.